Nos despedimos con la certeza de que volveremos pronto y más fuertes

El mes de junio suena a canción de fin de curso, a risotada inesperada y a clase alborotada.
El mes de junio huele a calor en el patio, a manitas sudadas y a prisas en el pasillo.
El mes de junio sabe a agua de la fuente, a manzana de última hora y a abrazo de despedida.
Pero este fin de curso será diferente.
Echaremos de menos los ensayos , el calor de las guardias de patio y los goterones de sudor de las horas de baile.
Nos diremos adiós con la mano, con los ojos y con una sonrisa.
Nos despediremos con la pena de la distancia pero con la certeza de que volveremos pronto y más fuertes.”